Se trata de instrumento orientativo sobre conducta de magistrados.
Encabezado por la ministra de la Corte Suprema, Rosa María Maggi, y la presidenta de la Corte de Apelaciones de Rancagua, Marcia Undurraga, se realizó en la tarde del miércoles 8 de julio, el primer seminario de difusión del Código Iberoamericano de Ética Judicial, en el auditórium del tribunal de alzada.
A la actividad asistieron cerca de 80 personas, entre ellas, los ministros de la Corte rancagüina; el fiscal regional de O’Higgins, Luis Toledo; jueces de toda la jurisdicción, abogados y funcionarios del Poder Judicial
El encuentro, transmitido íntegramente por el Canal de Televisión del Poder Judicial, fue organizado por el tribunal de alzada con el apoyo de la Asociación de Magistrados de O’Higgins y la Asociación Regional de Profesionales del Poder Judicial.
Durante la jornada expusieron, además de la ministra Undurraga, el juez del Tribunal Oral en lo Penal de Rancagua, Joaquín Nilo y el Doctor en Derecho de la Universidad Católica de Lovaina, abogado del Consejo de Defensa del Estado, Arturo Onfray.
El objetivo del seminario fue dar a conocer los aspectos más destacados de este instrumento internacional, así como constituirse en un espacio de deliberación en torno a la conducta que deben seguir los magistrados y los organismos auxiliares, facilitando la reflexión ética sobre los diversos aspectos de la función que desempeñan.
La ministra de la Corte Suprema, Rosa María Maggi, afirmó que este código no es un reglamento, sino una forma de guiar a los jueces hacia un trabajo de mejor calidad. “No se trata de una reglamentación de cómo ellos deben comportarse, sino de una orientación de su conducta hacia un nivel de excelencia. En este sentido, creo que lo que nos hace falta es mejorar el ‘deber ser’, mejorar el concepto de los jueces de decir ‘yo debo hacer mi trabajo en forma excelente’, no basta que resuelva la causa, debe agotar los medios para conseguir la mejor decisión”.
En este sentido, la presidenta de la Corte de Apelaciones de Rancagua agregó que “ante la crisis de confianza que existe, en todo Latinoamérica, debemos hacer todos los esfuerzos necesarios para que la gente confíe en las instituciones y especialmente en una tan sensible como la administración de justicia”.
El magistrado Joaquín Nilo señaló que “la idea es lograr un sistema que sea comprensible por la comunidad. Creo que si logramos encontrar el mecanismo de hablar en un lenguaje fácil en términos de comunicación y logramos que esa comprensión se consiga, vamos a estar cumpliendo con este principio de transparencia”.
En tanto, en referencia al acercamiento de este instrumento internacional a la comunidad, “la construcción de estos valores no se da solamente en la sede judicial, sino que desde la universidad, el conocer cuáles son las metas o norte al cual debe aspirar el juez, que esto sea conocido por los académicos hace que esto se traspase a los alumnos que mañana serán abogados o jueces”, afirmó Arturo Onfray.
El objetivo del seminario fue dar a conocer los aspectos más destacados de este instrumento internacional, así como constituirse en un espacio de deliberación en torno a la conducta que deben seguir los magistrados y los organismos auxiliares, facilitando la reflexión ética sobre los diversos aspectos de la función que desempeñan.
Fuente: Poder Judicial
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